Luis Cabrera, además de eminente hombre de gobierno, fue también un temible polemista en la prensa. Para quienes examinamos el quehacer de los políticos y funcionarios, perduran como ejemplos sus cargos concretos en que por verbigracia, ilustró con pelos y señales la manera en que los científicos, y muy señaladamente el secretario de Hacienda Limantour mal usó los recursos públicos para que Rafael Spínola, director de El Imparcial, labrara una fortuna personal al asociarse al oficialismo de su diario.

Humberto Aguilar se despide del IFE para regresar a Puebla.

A más de ochenta años del inicio de la Revolución Mexicana, se cuestiona si sus metas han sido alcanzadas o abandonadas. Se exploran sus logros y fracasos, sugiriendo que la Revolución se encuentra en un periodo de inactividad, como si estuviera en proceso de evaluación o ´inventario´.

Encuentro en un libro de Federico Fasano un epígrafe: "no llorar, no reír sino entender", que se aplica puntualmente a la situación nicaragüense, donde una revolución triunfante ha sido derrotada por su enemigo principal, el gobierno de Washington, y no por el voto de los ciudadanos, que en rigor estricto sólo han tenido, en toda la historia de ese país, dos ocasiones de manifestar libremente su voluntad, y ambas le fueron ofrecidas por el sandinismo.

En la guerra no se tnata sólo con balas. También es posible ernpujar hacia el hambre y la sed y conseguir así el rnismo efecto letal. Eso ha ocurrido a los habitantes sobre todo mujeres y niños, de las comunidades zapatistas que han sido desplazados a la selva por el avance del Ejército federal. Por ellos, por sus vidas, es urgente que las tropas retrocedan a donde estaban el 8 de febrero. Hacerlo no supondrá ni desdoro para la gallardía militar, ni derrota política para el gobierno y mucho menos ruptura del orden jurídico. En cambio, se salvarán vidas concretas, de personas con el rostro al aire, que pueden morir víctimas de la persecusión.